El primer día, la primera parte del concierto, el impacto era tal que no creía que él estuviera ahí y yo tan lejos, pero en el mismo lugar. Tardé demasiado en reconocer la mitad de las canciones, pero no importaba, eran diferentes y por lo tanto nuevas.
El segundo día lo disfruté mejor, con binoculares y todo. Pude comprobar todos los rumores, todo lo que plantea I’m not There, todo lo que se ha escrito y dicho de él: un enigma. Sonríe, mueve los pies, lleva el ritmo, toca la guitarra y el piano, canta, nada espectacular. Tal vez sea cierto, las canciones llegan a él, como un médium.
Nací casi 20 años después de que estos discos salieran y tienen canciones que me han hecho ser quien soy (tal vez no deban escucharlos).
Bringing It All Back Home (1965)
Highway 61 Revisited (1965)
Blonde on Blonde (1966)